La afición y la desgracia que tenían en común terminaron por unirles. Todos sabían tocar algún instrumento musical y todos se encontraban sin trabajo. Así nació la orquesta Los Sin Trabajo. Actuaban por la voluntad en las fiestas de los pueblos, pasos del ecuador, cumpleaños, despedidas de soltero, bodas, primeras comuniones, bautizos y demás festejos. El dinero recaudado se repartía entre aquellos miembros sin derecho a subvención estatal o con mayores necesidades económicas. Una parte era guardada para celebraciones, como la cena que se organizó cuando Anastasio el contrabajista se colocó en una empresa después de estar tres años en el paro. Era uno de los componentes más destacados y no querían que por haber cambiado su situación laboral tuviera que abandonar el grupo, sin embargo resultaba evidente que el nombre del mismo había dejado de tener sentido. Lo comentaron a los postres y decidieron denominarse de otra forma, para que nadie pudiera acusarles de fraude. A partir del siguiente concierto se llamarían Los Sin Trabajo y el Contrabajo.
Cita del día
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CITA DEL DÍA: «Elegancia es la ciencia de no hacer nada igual que los demás, pareciendo que se hace todo de la misma manera que ellos» (Honoré de Balzac).
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No hay nada como la sinceridad.
ResponderEliminarMe caen muy bien.
Si actúan por aquí iré a verles, trabaje o no.
Saludos.
Lo que hace falta es que tengan que cambiar el nombre muchas veces hasta convertirse todos en contrabajistas.
EliminarSaludos.
Hasta ahora no sabía de donde le venía el nombre al contrabajo ;)
ResponderEliminarSaludos.
Para que veas la de tonterías que aprendes visitándome.
EliminarSaludos, Alfred.
Los Sin Trabajo y el Contrabajo, que genialidad.
ResponderEliminarMaravillosa entrada :)
Si lo quieres ver así, yo encantado.
EliminarMuchas gracias, Tamara.
Jolie histoire musicale !
ResponderEliminarMerci beaucoup, Manouche.
EliminarHola!!
ResponderEliminarMuy bonito y me parece una iniciativa genial^^
Nos leemos, un abrazo ;)
¿Verdad que es buena idea? Matan el gusanillo musical y de paso salen de los apuros más urgentes.
EliminarUn abrazo.
Hola. muy bueno el juego de palabras. Seguimos en contacto
ResponderEliminarGracias, Marta.
EliminarNos seguimos, sí.
Eres la leche , Chema. Deberías publicar un libro con estas historias fantásticas.
ResponderEliminarMe has recordado a un Sintrabajo que me contactó este fin de semana porque quiere huir de España y mientras tanto se dedica a tocar la Gaita.
Besos
No sé yo cómo se hace eso de publicar libros.
EliminarEspero que el único motivo que tenga para "huir" de España sea buscar un trabajo.
Besos, Celia.
¡Qué imaginacion!
ResponderEliminarMuy Bueno
Abrazos
Gracias, Chaly.
EliminarUn abrazo.
Jajajaja grandisimo, casi me gusta más el nombre final que el original. Otra historia estupenda ^^
ResponderEliminarA mí también me gusta más el último.
EliminarGracias, Holden.
Buenísimo Chemaaaaaaaaaaaaaa! jajaja
ResponderEliminarMadre mía pero qué imaginación la tuya......eh?
besitos =)))))
Solo es ponerme a mirar las palabras como si no supieran lo que quieren decir y buscarles el significado que me parece deberían tener.
EliminarBesos.
Pues lo haces muy bien!
Eliminar=)))))
Gracias.
Eliminar:)
ResponderEliminarSalud
;)
EliminarSalud.
Chema, aprovecho que hoy ando Sin TRabajo y te hago una visita.
ResponderEliminarUn gran abrazo
CArlos
Pues no sabes lo que me alegro, porque hacía días que no sabía de ti.
EliminarOtro fuerte abrazo para ti, Carlos.
Yo ando CON trabajo, a ver si me meto en una banda de fiestas veraniegas y salgo de la abulia, por decir.
ResponderEliminarUn abrazo
No te veo yo a ti muy abúlica precisamente.
EliminarUn abrazo.
Gracias, Julio David.
ResponderEliminarSaludos.
jajajaja que bueno, me gustó mucho, Macondo.
ResponderEliminarUn beso y muchos contrabajos
Buena falta nos hace: muchos contrabajos.
EliminarBesos, Carmela.
Eres grande Chema, grandísimo, y si me paso a esta hora en que ya el cansancio me agobia, tu cerebro y tu ingenio me parecen inmensos.
ResponderEliminarQue habilidad XD, jugando con las palabras. Con ese nombre seguro que triunfan.
Estoy "pot".
Buenas noches y...
Besos.
Gracias por haberme hecho un hueco en tu cansancio.
EliminarBuenas noches y muchos besos.
Esta historia me recuerda un poco a "Full Monty" (una de mis pelis favoritas), porque, de un contexto triste, has sabido extraer la chispa, el lado gracioso del asunto. Geniales todas tus entradas.
ResponderEliminarMuchas gracias, Sara.
EliminarEntonces se podría decir que este afortunado tocaba el contrabajo con trabajo.
ResponderEliminar(sí, ya sé que hacer el chistecito ahora, cuando tú has dado la clave, es fácil, pero no lo he podido remediar).
Ni falta que hacía que lo remediaras.
EliminarGracias por tu aportación, Ángeles.
En estos tiempos este grupo debe ser de los pocos que se preocupan por la honestidad...
ResponderEliminarMuy bueno.
Un abrazo.
Aún queda gente honesta.
EliminarGracias, Alberto.
Un abrazo.
Magnífico.
ResponderEliminarComo se trata de la jugada de un crack, con ese dominio sobrenatural del balón, me ha resultado imposible adivinar en qué se convertiría el título de la entrada, ni hacia donde iba a salir rebotada la pelota.
Has avanzado magistralmente en la historia hasta quedar centrado y encontrar un hueco para chutar y (bien sûr) meter gol. Nada menos que “contrabajo”. De leyenda.
Un fuerte abrazo, Kaiser Chema.
¡Xaheraaaaaaaa!
EliminarUn fuerte abrazo, representante Karima.
Buen juego de palabras con que culminas el relato... Un texto que vibra
ResponderEliminarUn abrazo
Te agradezco tus palabras, Ildefonso.
EliminarUn abrazo.
No defraudas, tienes un ingenio ilimitado.
ResponderEliminarEl cuento, chulísimo, nos llevas por dónde quieres hasta dónde deseas.
Qué placer leerte...
Besos.
¿Todo eso lo hago yo? No sabes cómo te agradezco que me lo digas.
EliminarMuchas gracias, hermosa.
Besos.
Tú sentido del humor me apabulla. Como si me dieran un mazazo de alegría.
ResponderEliminarBesos jocoso Chema
Lo de apabullarte con lo que escribo me resulta inconcebible, pero siempre que sean de alegría bienvenidos sean los mazazos.
EliminarGracias, generosa Flor de María.
Y besos.
Perfecta la conjunción de los "sin" y los "con". Lo malo es que los primeros son muchos más que los segundos.
ResponderEliminarGenial el doble sentido de las palabras, Chema eres un experto en esto.
Besos
Puri
Esperemos que cambien los tiempos y que se vayan imponiendo los contrabajistas.
EliminarBesos, Puri.
¡Qué bonito! :)
ResponderEliminarGracias, Silvia.
EliminarPor culpa de las vacaciones de Semana Santa casi me pierdo la historia de los "sin trabajo y el contrabajo". ! Como puedes tener tanta imaginación !
ResponderEliminarEs simplemente leer las cosas de otra manera.
EliminarRebuscando entre tus textos más antiguos para leer más cosas tuyas me encontré este cuyo solo nombre ya me llamó mucho la atención. Y, cómo no, el relato en sí mismo me resultó una delicia. Por un momento temí que el resto del grupo echara al contrabajista al no amoldarse ya a su puesto de "músico desempleado", pero no, al final se impuso la solidaridad, se cambió el nombre, y santas pascuas... ¡Genial!
ResponderEliminarGracias, Alfredo.
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