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CITA DEL DÍA: «Elegancia es la ciencia de no hacer nada igual que los demás, pareciendo que se hace todo de la misma manera que ellos» (Honoré de Balzac).
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Trabajaba en un proyecto en la selva y los aviones eran en su mayoría DC4 (chatarra de la II guerra mundial)
ResponderEliminarLa pista era un rectángulo rodeado de monte alto, cuando llegábamos a destino la pista no se veía en razón de nubes bajas, el piloto por radio preguntaba al operador de la pista: ¿en qué dirección me escucha? Y le respondían: “Nor este” ¿Y ahora? “sud este” y así se la pasaba preguntando hasta que le daban la dirección que el entendía que era la correcta y sumergía el avión a través de las nubes y aterrizaba. No creo que nadie se hubiese cagado, pero sí que muchos ya no querían volar y preferían salir o entrar, por tierra.
Abrazos
Gracias por contarnos tu experiencia, Charly.
EliminarUn abrazo.
Ese avión, por favor, sólo imaginarme dentro...me mareo o, como dices, me cago de miedo :-)
ResponderEliminarUn abrazo, y feliz día
Mejor no te imagines nada, que igual no duermes esta noche. ¡Qué susto!
EliminarUn abrazo y feliz día también para ti.
Ja, ja, ja. No quiero imaginarme el olor nauseabundo que desprendería el interior de ese avión.
ResponderEliminarUn abrazo.
No es para menos.
EliminarUn abrazo.
jajaja, me imagino dentro del avión envuelta en heno de pravia jajaja el de la basura es muy bueno jajjaja. Feliz miércoles Chema. Un abrazo
ResponderEliminarCelebro que te haya gustado el de la basura, aunque quizá resulta un poco previsible.
EliminarUn abrazo.
Jajaja, son muy buenos los tres, imposible elegir.
ResponderEliminarFeliz miércoles.
Pues no elijas. Te envuelvo los tres.
EliminarFeliz miércoles.
Gracias, el recuento de víctimas del tercero es genial. Y los otros tambien se han llevado una carcajada. Abrazucos
ResponderEliminarMe alegro de que los hayas disfrutado.
EliminarUn abrazo.
Son buenísimos!!!!
ResponderEliminar;))))))
Gracias!!!
Un abrazo!!!
Me alegra que los hayas disfrutado.
EliminarGracias a ti, por venir.
Un abrazo.
Jolin, Chema, qué impactante lo del avión, aunque se queda en nada comparado con un funcionario amable, jajajak.
ResponderEliminarMuy buenos.
Un abrazo!
Me alegra que te hayan gustado, Pepe.
EliminarUn abrazo.
El primero real como la vida misma y el de la bolsa buenísimo.
ResponderEliminarGracias, Tracy.
EliminarUn abrazo.
En el primero casi me emociono yo también... jajjaa, el segundo qué risa y el tercero me ha hecho pensar en lo tranquilo que es no viajar en avión... jo...
ResponderEliminarSaludos.
Yo tengo un hermano y una cuñada trabajando en Hacienda y no es para tanto. Hasta me llevo bien con ellos.
EliminarSaludos.
Los tres son buenos. El del avión, madre mía que miedo. Para que digan que es el transporte más seguro 😥
ResponderEliminarEl más seguro sí que debe ser, lo que pasa que solo salen en las noticias los que se la pegan y las fatales consecuencias que suelen tener.
EliminarCon el tercero todavía me estoy riendo. Gracias, Chema.
ResponderEliminarMe gusta leer tus entradas antes de irme a la cama, no hay nada mejor que dormir con la sonrisa en los labios y en la cabeza.
Un abrazo.
Pues muy felices sueños, Pilar.
EliminarUn abrazo.
¡Qué miedo ese aterrizaje! Cagados me parece poco. Me habrían dado varios infartos en esos segundos.
ResponderEliminarHace años, cerca de mi casa en A Coruña, le robaron a una vecina un bolso grande de un tirón. Llevaba a su gato muerto para enterrarlo. ¿Imaginas la cara de los rateros al verlo?
Gracias por las risas (aunque el último no me hizo sonreír, ¡qué miedo!)
Besos
Eso de los infartos con cosas de hombres que somos muy flojos. Las del sexo supuestamente débil estáis curadas de esas cosas, aunque ahora ya vaya pasando alguna por ese trance.
EliminarSe le estuvo bien a los cacos de A Coruña. Ojalá hubiera sido una bomba.
Besos.
¡Hola, Chema! El primero es la leche y es que el trato con la administración pública es kafkiano. Por mi trabajo, lamentablemente lo sufro bastante y he llegado a situaciones como llamar por teléfono y que me digan "por la ley de protección de datos no puedo decirle nada", pero luego te presentas y te dicen "por el protocolo COVID no puedo atenderle". Buenas excusas para escaquearse han encontrado. Un abrazo!
ResponderEliminarYo solo me cachondeo, porque tengo un hermano y una cuñada trabajando en Hacienda. Quiero pensar que ellos son de los que te hacen la fotocopia.
EliminarUn abrazo.
Me encanta venir aquí a echar unas risas.
ResponderEliminarVeo gente que lucha encarecidamente por reciclar.
Un beso.
Me alegra que te guste venir. Eso me anima a seguir.
EliminarUn beso.
Madre del amor hermoso. El último no es para menos… Pero se me ha quedado en la retina el otro corriendo para acabar la bolsa en el contenedor, ja, ja, ja…
ResponderEliminarGracias por las risas, querido amigo.
Siempre un placer visitarte.
Abrazo grande, y muy feliz finde 💙
(No sé si no le he dado a la tecla, o Blogger se ha tragado el comentario. Por si acaso, ahí va de nuevo)
Estaban los dos en spam. Dejo este y quito el otro. Disculpa el retraso en descubrirlos y responderte.
EliminarEl placer es mío porque vengas a visitarme.
Un fuerte abrazo y feliz semana.
Ojalá no tengas que hacer uso del doble pañal nunca.
ResponderEliminarOtro abrazo para ti, Julio.
Mi muy querido amigo Macondo.
ResponderEliminarEl video del avion esta impresionante.
Me supongo tomarían mucho Lomotil o Inmodium.
Abrazos grandes
Si que impresiona, sí. No sé lo que tomarían.
EliminarFuete abrazo, Ricardo.
jajaja la bolsa de reciduos,lloré de risa,abrazos.
ResponderEliminarYo me lo vi venir, por eso no me hizo tanta gracia.
EliminarUn abrazo.
Plena simpatia en todos, amigo...
ResponderEliminarUn abrazo y el deseo de un feliz domingo
Gracias, Ildefonso.
EliminarFeliz domingo.
Un abrazo.
Chema, estas entradas son divertidísimas, impagables.
ResponderEliminarNo tienen desperdicio alguno, ´¡Viva Zaragoza!
Besos.
Tú sí que eres impagable.
EliminarGracias, maja.
Besos.
Jajaja, que buenos los tres.
ResponderEliminarEl de la bolsa es genial.
Y el de Hacienda. Hemos llegado a unos límites...
En cuanto al del avión, menuda susto. Hace tiempo que no viajo en avión, pero últimamente, mi claustrofobia se ha acentuado y no creo que vuelva a subirme a un aparatejo de esos...jejeje.
Gracias por hacerme reír.
El primero hace pensar que algunas cuestiones son universales.
ResponderEliminarEl tercero estaría mejor si el cartel apareciera al final.
No aclaración si sólo los pasajeros o también la tripulación. Pienso en la imagen que se le atribuye a las azafatas.
La ventaja de que esa situación sea generalizada es que nadie se siente avergonzado ante los demás.
Saludos.