El presidiario se dejó ver por el funcionario metiendo dinero en la taquilla. Confiaba en que las cosas sucederían tal y como las había previsto. Al entrar en la celda después de la comida, observó que el candado había sido manipulado. Ya solo quedaba el segundo paso para confirmar completamente sus expectativas. Abrió y comprobó con satisfacción que de los ciento cuatro euros se había quedado con los dos billetes de cincuenta, cometiendo la torpeza de no llevarse las monedas. Fue precisamente ese pico que le dejó el que le sirvió para cavar la zanja a través de la cual ganó la libertad.
Cita del día
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CITA DEL DÍA: «Los altavoces refuerzan la voz, pero no los argumentos» (Hans Kaspar).
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Ese pico fue colocado tan sutílmente que pocos se percatarán de su presencia.
ResponderEliminarMuy bueno!!!
Feliz fin de semana
Con que se percaten los lectores me conformo.
EliminarGracias, Nieves.
Feliz semana también para ti (primero el finde).
Un preso muy ingenioso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y un funcionario que mordió el anzuelo.
EliminarUn abrazo, Matías.
jajaja Trabajo le habrá costado... :)
ResponderEliminarSalud
Lo que sobra estando preso es tiempo.
EliminarSalud, Genín.
Muy inteligentes el presidario y el narrador
ResponderEliminarAbrazos
El narrador se apoya en la agudeza del presidiario para pasar por listo también, pero es del montón.
EliminarUn abrazo, Chaly.
Esto de este preso está más currado que los de "Fuga de Alcatraz", mira que listo el jodido funcionario.
ResponderEliminarAbrazo Macondo.
El listo es el preso. El funcionario más bien es chorizo.
EliminarUn abrazo, Rafa.
Ingenioso el preso, Macondo. Qué bien has hilvanado la historia.
ResponderEliminarGracias, Tecla.
EliminarTienes una imaginación portentosa :))
ResponderEliminarUn beso.
Simplemente juego con los dobles significados de las palabras.
EliminarBesos.
Una metáfora muy "aguda".
ResponderEliminarMuchas gracias, Ángeles.
EliminarHola, Macondo
ResponderEliminarUna genial manera de ponernos a pensar.
Todo corrupto debe aprender primero a no dejar huellas que puedan comprometerle; afortunadamente el cerebro sólo les da para pensar en enriquecerse más.
Feliz fin de semana
Gracias, Rud.
EliminarFeliz fin de semana también para ti.
Je, je, je... Nunca menospreciamos el valor de las monedas, ¿cuántas veces no hemos echado en falta se euro o esa moneda de dos euros al tomar algo en un bar? ¿O para quitar la presión a los radiadores? ¿O para abrir el compartimento de las pilas de algún juguete? De momento no las he necesitado para la situación que planteas en el micro, pero nunca se sabe... Saludos!
ResponderEliminarLo que para el funcionario era un poco para el preso era un pico.
EliminarGracias por tu comentario, David.
Saludos.
Ja, ja, ja, muy ingenioso.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias, Raúl.
EliminarSaludos.
Qué ingenioso, sí :)
ResponderEliminarGracias, Silvia.
EliminarCuatro y pico..¡Y vaya sí picó! Saludos.
ResponderEliminarMás bien ciento y pico.
EliminarSí que picó, sí.
Saludos.
Que listo el preso y que chorizo el funcionario.
ResponderEliminarPicó, picó...
El que picó con el pico fue el preso, pero supongo que el funcionario se picó al ver que había caído en la trampa por chorizo.
Eliminar¡ Que inteligencia tienes para jugar con el doble sentido de las palabras ¡
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, pero solo es cogerlas y jugar con sus distintos significados.
EliminarUn abrazo.
Jajaja!!! Operación soborno, dejando la propina, muy bueno.
ResponderEliminarTus juegos de palabras no tienen fin. :)
Un abrazo.
Por lo menos hay tantos juegos como significados de las palabras.
EliminarUn abrazo.
Bien por el preso!
ResponderEliminarY por ti,siempre sacando jugo a las palabras.
Besos.
Les chupo las patas, como a los cangrejos.
EliminarBesos, Carmen.
¡Qué bien juegas con las palabras, jopé! Ahora solo te queda "Piedra, papel, tijera", jajajaja.
ResponderEliminarBesos.
Sé de qué va, pero no he jugado nunca a ese juego.
EliminarBesos.
Eres ingenioso, original y juegas con las palabras como Todo un Maestro, en verdad, te admiro, Macondo.
ResponderEliminarSabes una cosa que creo nunca te llegué a decir? Pero no te enfades Jajaja que hasta no hace mucho no se por qué pensé que tu perfil era de mujer hasta que Indagué y descubrí que estaba equivocada, pero es que no me importa saber el genero, ya ves que tarde lo descubrí, lo que importa es quien hay detrás de quién escribe y veo que tú eres talentoso y te felicito.
Un beso enorme.
No creo que sea para tanto la cosa, pero agradezco tus palabras.
EliminarCómo voy a enfadarme por ese error. Aunque Macondo suene masculino, mi icono de Mafalda genera confusiones. No es la primera vez que me sucede.
Otro enorme beso también para ti.
Preso quedo de tu agudeza, Macondo :D
ResponderEliminarEres muy amable, JuanRa, a la par que un poco exagerado. De todas formas, muchas gracias.
EliminarUn preso muy listo y un funcionario muy agudo pero su agudeza se convirtió en torpeza por despreciar ese pico.
ResponderEliminarEres un genio del doble sentido de las palabras Chema.
Besos.
Puri
Muchas gracias por tu comentario, Puri.
EliminarBesos.
Pues ese pico sí que fue útil, y más discreto que los de cavar de toda la vida.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz semana.
Feliz semana también para ti, Marigem.
EliminarUn abrazo.
Ese pico, en la cabeza de un ave, también horada a veces, si no le preguntamos al pájaro carpintero
ResponderEliminarUn abrazo
Bien cierto.
EliminarUn abrazo.