Cita del día

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CITA DEL DÍA: «En primer lugar acabemos con Sócrates, porque ya estoy harto de este invento de que no saber nada es un signo de sabiduría» (Isaac Asimov).

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jueves, 20 de septiembre de 2018

Mi decálogo para dejar de fumar

REEDICIÓN (edición: 19/02/2012)
 
 
 




Te decía en el artículo anterior que fui fumador de más de tres paquetes diarios durante bastantes años. Hace ya unos cuantos, cuando los fumadores no se habían convertido todavía en el centro de tantas iras, tuve la buena ocurrencia de dejarlo. Me comprometí a comentarte mi experiencia y voy a hacerlo en forma de consejos. Son los que a mí me sirvieron y espero que a ti también. Unos me los dieron y otros son de mi cosecha. Tan importantes son los que puedan llevarte a tomar la decisión, como los que te ayuden a ponerla en práctica.


1. NO TE CONSIDERES UN CASO ESPECIAL:
No estás más enganchado que nadie, ni el tabaco representa para ti más que para otros fumadores que hemos sido capaces de dejarlo. Yo también pensaba que iba a ser incapaz de trabajar, de pensar, de hablar, de disfrutar, de leer, de escribir… sin un cigarro en la mano. La vida no solo no pierde sentido, sino que lo gana… y seguramente por más tiempo.


2. ESCARMIENTA EN CABEZA AJENA:
Piensa que hoy eres un privilegiado, por poder dejarlo voluntariamente. Seguramente conoces a alguien que no supo encontrar el momento y acabó  teniéndolo que dejar por una enfermedad. ¿Qué no hubiera dado por una segunda oportunidad? Tú, hoy, la tienes.


3. ÉSTE NO ES UN MAL MOMENTO:
Siempre encontrarás una excusa para retrasar la decisión. Cuando estés trabajando o estudiando, querrás aparcarla hasta las vacaciones. Cuando éstas lleguen, dirás que no quieres amargártelas. Tampoco te agarres a que estás pasando por un mal momento. Éste es tan bueno como cualquier otro y mejor que dentro de unos años. No te engañes.


4. NO BUSQUES MEDIAS SOLUCIONES:
Sé que en este punto hay discrepancias, pero yo tengo muy claro que se debe dejar de fumar radicalmente. Si te limitas a querer ir reduciendo paulatinamente el número de cigarros al día, serás mucho menos estricto que si sabes que no debes  fumarte  ninguno. Por cualquier motivo te saltarás el plan establecido y, en cuanto lo hayas hecho una vez, le perderás el respeto a seguir haciéndolo más veces hasta que termines abandonando.


5. PONTE UNA FECHA:
Si puede ser señalada (cumpleaños, aniversario, primero de mes) mejor, pero no es imprescindible. Pongamos que sea en  un plazo de uno a tres meses. Una vez elegida, se lo dices a todo el mundo.  Se trata de que no te salga del todo gratis bajarte del carro a las primeras de cambio. De que te dé un poco de vergüenza, después de haber montado el número, abandonar enseguida.




6. NO PIENSES QUE ES “PARA SIEMPRE”:
Pensar que es “para siempre” podría agobiarte un poco, sobre todo al principio. Realmente, puedes volver cuando quieras. Tu objetivo es aguantar hoy. Mañana ya veremos, pero conforme veas que vas consiguiéndolo, irás sintiéndote más fuerte para seguir. El tiempo correrá a tu favor.


7. UTILIZA AYUDAS:
Creí que el chicle de nicotina no me serviría de demasiada ayuda, porque consideraba que la mayor parte de mi problema residía en mi costumbre de hacerlo todo con un cigarro en la mano. Había infravalorado el porcentaje de culpa atribuible a la adicción. Comprobé que, con el chicle de nicotina, dejar de fumar estaba  costándome menos esfuerzo del que había pensado. En consecuencia,  lo utilicé sin reducir la dosis (dos o tres meses) mientras me acostumbraba a prescindir de la compañía del cigarro. Superada esa parte del problema, fui sustituyéndolo poco  a poco por el de menta.
Cuando yo dejé de fumar no se comercializaban todavía los parches, pero supongo que pueden ser tan buenos o mejores (requieren menos atención) que los chicles. Otras personas se han ayudado con éxito de la acupuntura.


8. CAMBIA ALGUNOS HÁBITOS:
Si relacionas el cigarro con determinadas situaciones, evítalas en lo posible. Solamente será al principio. El ejercicio físico, aunque solo sea caminar a buen ritmo, te ayudará mucho a superar la tensión.


9. PROCURA COMER LIGERO Y BEBE MUCHOS LÍQUIDOS:
Lo primero es para evitar que las comidas pesadas te inviten a pensar en el cigarro, pero no lo tomes a rajatabla. Si te apetece una fabada, te la comes y en paz. Vamos a centrar el sacrificio en no fumar. Lo mismo te digo del café. Ya sabes que su consumo llama al cigarrillo, pero si tienes la costumbre de tomarlo no hace falta que prescindas totalmente de él. Si no puedes lavarte los dientes después utiliza chicles de menta, independientemente de que estés usando o no los de nicotina.
Con respecto a lo de beber muchos líquidos, estoy refiriéndome sobre todo a zumos y agua. No cuesta esfuerzo y son buenos para todo. Te alivian las ganas de fumar y te ayudan a consolidar esa limpieza interna que has iniciado.


10. NUNCA CREAS QUE LO TIENES SUPERADO:
Si al alcohólico se le mentaliza para que nunca cometa la torpeza de pensar que tiene superado el problema, lo mismo debes hacer tú. No juegues con fuego, porque terminarás quemándote. Ni una calada, ni mucho menos un cigarro, aunque haga años que lo has dejado. Si el amigo que se casa no quiere entender que no vas a fumarte un puro el día de su boda, es porque no ha fumado nunca o porque no es tan amigo.


 

61 comentarios:

  1. No fumo, pero me parece que esta entrada se la voy a pasar a un par de amigas que quieren dejar de fumar y no dan el paso. Tan cerca y tan lejos, ya me entiendes.
    ;)

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    1. Me encantaría que pudiera servirles de algo.

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    2. Gracias por el comentario en mi blog. Ojala mas gente consiguiera dejar de fumar. Te dejo mi link por si algun lector tuyo quiere ver anuncios originales anti tabaco. Un saludo, http://marketingyalgodesexo.blogspot.com/2012/02/como-dejar-de-fumar.html

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    3. Pues por aquí queda. Gracias y saludos.

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  2. Completamente de acuerdo con todos los consejos,son de sentido común. Sobre todo no hay que autoengañarse con el "lo voy a dejar poco a poco" No funciona, hay que dejarlo de golpe y a lo bestia, se pasa mal, muy mal, sobre todo por la parte psicológica, pero no hay otra manera, y jamás bajar la guardia, ya te lo comenté, lo dejé dos años y medio y por un simple cambio de amigos y costumbres volví a fumar, y hay para matarme.
    Oye, me hago miembro yo también, que me ha gustado, al igual que tu también escribo en otros blogs de temática diferente, uno de ellos muy divertido por cierto.
    Te dejo las direcciones por si quieres también echarles un vistazo

    http://tecnicasdeexito.blogspot.com/

    http://tormentaacida.blogspot.com/

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    1. Yo, de momento, no escribo más que en éste. Llevo sólo tres meses dándole, pero la verdad es que me he enganchado. Voy a ver esos otros en los que escribes. Bienvenida a mi blog y gracias por hacerte seguidora.

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  3. Yo llevo desde febrero, tres meses también. Es que en tu perfil de blogger me ha parecido ver que colaborabas en otros, por eso lo que te he comentado

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    1. No me cunde tanto como a ti. ¡Qué tía! Ya he entrado en los otros dos en los que escribes. Por cierto que me ha encantado la "Comida familiar en casa del patriarca". Dejo aquí el enlace, por si alguien quiere disfrutar un rato:
      http://tormentaacida.blogspot.com.es/2012/05/comida-familiar-en-casa-del-patriarca.html
      Otro rato con tiempo sigo leyendo.

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    1. De nada, Ismael. Espero que te sirvan los consejos, si los necesitas.

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  5. Hola, son buenos los consejos, yo nunca he fumado tanto, y lo he dejado 2 veces, la primera no me costó tanto, conocí a gente que no fumaba, al principio fumaba menos porque les molestaba el humo, y poco a poco dejé de fumar, porque dejó de ser un hábito en mi vida. Pero volví a fumar al cabo de 3 años. La última vez que lo dejé fue hace 5 años, una amiga fue a un método que la habían asegurado que era 100 por cien eficaz y me apunté, solo dejé de fumar 3 meses (creo que lo justo para amortizar el tratamiento, que por cierto duraba 30 minutos), esa vez desde el momento que salí de la consulta aquella, ya sentía ganas de fumar.
    Lo que si hago , de vez en cuando, es dejar de fumar uno o dos días.
    Si lo dejo, ya te comentaré
    Gracias

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    1. Yo veo más complicado tratar de bajar la dosis o dejar dos días que dejarlo del todo.
      Gracias a ti por comentar aquí tres años después.

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  6. Yo no fumaba tanto... de promedio unos cinco cigarrillos al día... pero al final también lo he dejado.
    Me ayudó la primera semana el cigarrillo electrónico y luego ya lo dejé también.

    Buenos consejos.

    Saludos.

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    1. Yo creo que fumarse dos o tres al día no tiene que ser ni perjudicial. Lo que encuentro complicado es tener tu sensatez de no pasar de ahí.
      Saludos.

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  7. Un interesante decálogo, yo fui durante demasiados años fumador de una cajetilla diaria, el primero de enero de hace ocho años dije "ni uno mas" y hasta hoy.
    Un abrazo.

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    1. Me alegra que te haya resultado interesante.
      Somos muchos conversos, unos tomando medidas y otros a pecho descubierto, como parece lo hiciste tú.
      Un abrazo.

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  8. Consejame : me da asco no llego empezar a fumar !

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    1. Sensatez has demostrado por no empeñarte en superar ese "asco" del principio.

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  9. Muy sabios consejos. Es una adicción, sin más. Por eso se puede dejar. Es cuestión de querer de verdad

    Muy didáctico y simple. Un abrazo

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    1. Indudablemente lo primero que se necesita es estar convencido de que quieres dejarlo.
      Un abrazo.

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  10. Estupendos consejos los tuyos, y es de agradecer que intentes ayudar con tu propia experiencia a quienes todavía no han dado el paso definitivo para dejar de fumar.
    El próximo 15 de Octubre cumpliré 6 años como ex fumador. Yo utilice alguno de tus consejos, especialmente el que se refiere a reducir o eliminar ciertos hábitos (en mi caso era el café) que van asociados a la costumbre de fumar. No podía tomarme un café sin acompañarlo con uno o dos cigarrillos y era un "cafetero" empedernido. Mi adicción a fumar era, sin embargo, más psicológica que física. POdía estar sin fumar horas y horas en un viaje o durante una reunión maratoniana, pero cuando atendía al teléfono, escribía o leía un informe, o en la sobremesa, necesitaba un cigarrillo.
    Yo sí dejé de fumar paulatinamente, reduciendo poco a poco el número de cigarrillos, a pesar de que todos me decían que era un mal sistema. Cuando por fin llegué a fumar solo tres al día decidí que era el momento de dejarlo del todo. Estaba, eso sí, muy mentalizado y esto es muy importante. Y, contra todo pronóstico, a pesar de que muy al principio sí lo echaba en falta, logré desengancharme totalmente hasta el punto de que ahora me desagrada la idea de fumar y estoy casi convencido (nunca de puede decir nunca jamás) de que no volveré a fumar en mi vida.
    También influyó mucho las dificultades crecientes que había para fumar. Me sentía como un proscrito y un drogata cada vez que tenía que salir a la calle para fumarme un pitillo.
    Quizá de haber sido un gran fumador como tú (yo "solo" consumía un paquete diario), la cosa me habría resultado más difícil.
    Un abrazo.

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    1. El café y el tabaco hacen unas migas estupendas. Recuerdo que cuando dejé de fumar el primer chicle que tomaba después del café, parecía que soltase la nicotina a chorros para ir a encontrarse con él.
      Admiro que lo dejaras paulatinamente. A mí me parece mucho más complicado.
      Yo dejé hace 25 años, por lo que no llegué a encontrarme con las actuales dificultades que encuentran los fumadores. Odio que la gente se comporte así porque está de moda y sobre todo si son exfumadores.
      Un abrazo.

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  11. Unos consejos tan válidos ahora como en aquel lejano 2012. Por suerte la gente y sobre todo la juventus se van dadndo cuenta de que fumar es una tonteria y además cara. Personalmente lo deje hace muchos años, era fumador de un paquete diario más algunas pipas. Fuen una decisión de un día para otro y estuve llevando el paquete encima más de un mes. Estaba el pobre arrugadito.
    Buenos consejos para una buena causa. La salud.
    Un abrazo.

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    1. Ya veo que tú lo hiciste a la brava. Yo recurrí a la ayuda del chicle de nicotina. El caso es que nos fue bien a los dos.
      Cuando yo dejé hace 25 años el paquete de Ducados estaba a 85 pesetas (medio euro), o sea que el precio no era demasiado problema.
      Un abrazo.

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    2. Quise decir juventud. :)
      En mi época había pasado dl negro "Habanos" que dejó de comercializarse al rubio "Camel" y era una pasta. Aunque no lo hice por eso, tenía una hija pequeña y no me pareció bien el ejemplo que le daba. Tenía dos añitos y ella misma, sin decirle yo nada, me traía el apquete y el encendedor a dónde estuviese sentado. No digo más.
      Otro abrazo.

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    3. Qué sol de niña. Tan sol, que te hizo pensar y recapacitar. Lo que no se haga por ellos —y eso que yo no tengo— no se hace por nadie.
      Otro abrazo también para ti.

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  12. Yo fumaba mucho pero lo dejé cambiando cigarros por chicles, regalices y caramelos sin azúcar, y es la mejor decision que he tomado a lo largo de mi vida.

    En estos tiempos creo que hay otro vicio, el del móvil, casi todos con él móvil en la mano, en lugar de cigarrillos.

    Muy buena entrada, Macondo.

    Un besazo.

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    1. A mí el ordenador sí me enganchó, pero el móvil nada. Odio el wasap y otras muchas cosas de él, lo que pasa que hoy en día casi es imprescindible.
      Gracias, María.
      Un beso.

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  13. Hola.
    Yo lo dejé hace 14 años(pasado mañana será el aniversario)y es una de las mejores decisiones de mi vida. No es fácil pero compensa, en mi familia, en los últimos 10 años hemos perdido a 4 personas por eso, y en tema amistades y conocidos a unos cuantos más.
    Un abrazo.

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    1. Yo hice 25 años el 1 de julio. Olvidé celebrar las Bodas de Plata.
      Un abrazo.

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  14. Hola Chema , nunca fumé ni entendí el porque la gente lo hace, pero comprendo que como cualquier adicción conlleva un sacrificio para dejarla, y si a ti ,esos consejos te sirvieron está bien que los publiques para que otros/as puedan ponerlos en práctica.
    Besos
    Puri

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    1. Solo con que ayuden a una persona ya doy por bien escrita la entrada.
      Besos, Puri.

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  15. Voy a ver si lo consigo, siguiendo estos sabios consejos. Yo soy fumador, y además de que uno se está jodiendo la salud, no veas el dineral que te gastas en tabaco, y en mí casa por partida doble, ya que mi mujer también fuma.

    Abrazo Macondo.

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    1. Pícate con tu mujer y dejad al mismo tiempo (pero no fumes a escondidas en el baño, que te conozco).
      Un abrazo, Rafa.

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  16. Desde luego, voy a tener que aplicarme el cuento, o el decálogo. Muy buenos consejos, Macondo. Un abrazo!

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    1. Te aseguro que si lo dejé yo tú también puedes.
      Gracias, David.
      Un abrazo.

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  17. La verdad es que las excusas que uno se pone para no dejarlo son de lo más estúpidas, pero es lo que tiene cuando sabes que estás enganchado y todavía no has acumulado el valor para plantearte dejarlo.
    Otro abrazo para ti, Julio.

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  18. Nunca fumé, me crié en un estanco.

    Un beso.

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  19. Existen personas que dicen que si comen eso o aquello les hace daño y viven traumatizadas por esos pensamientos y se privan de muchos buenos alimentos, en cambio yo no pienso de esa manera, a mi nada me hace daño —así pienso y eso lo creo—. Hay gente que huye del humo del cigarrillo esta gente está convencida —pues la prensa los ha convencido— que ese humo trae cáncer. Lo que la gente ignora es que algunos humanos son más predispuestos a sufrir cierta dolencia y otros no.
    Algún día dejare de fumar y en ese momento seguiré tus consejos.

    Abrazos

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    1. Ya se ha escuchado decir en algún sitio científico que para algunas cosas (como la demencia senil) puede ser hasta beneficioso. Estoy de acuerdo en que mucho hay de moda, pero bueno no es.
      Un abrazo, Chaly.

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  20. Claros y concisos consejos. Además, versátiles; la mayoría pueden emplearse para ayudar a "dejar" otras "cosas". Me gusta el tono en que los presentas porque para nada son regaños desde la superioridad moral.
    Mi abuelo era fumador, así que a mí el humo del cigarro no me molesta porque me recuerda a él. Tampoco me molesta ese aroma que queda en las manos o la ropa, ni el aliento que deja.
    Creo que no pasa gran cosa si alguien fuma un cigarro al día o dos o tres cigarros en las reuniones; está claro que es un "mal hábito", pero alguno tenemos todos. Hay mucha exageración en la forma en que se trata el asunto. Sin embargo, llegar a un paquete diario o más, como en tu caso, sí me parece de cuidado y de pensarse. Qué bueno que lograste dejarlo. Ya he comentado antes que tengo una amiga oncóloga que me dijo que de la larga lista de cosas que se especula o se sabe que son cancerígenas, en realidad lo único que se debería temer es el efecto del cigarro.

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    1. Tengo la suerte de que no me molesta el humo del tabaco, pero aunque así sucediera no tendría la poca vergüenza de mirar con cara de odio a los fumadores después de haberlo sido durante bastantes años. Sin embargo los hay que llevan tres meses sin fumar y no los dejan vivir, aunque estén fumando al aire libre. Sinceramente, a mí me molestan más los que teniendo ducha en casa parece que la tengan de adorno.
      Veo mucho más complicado mantenerte en dos o tres cigarros que dejarlo del todo, aunque cada uno habla desde su experiencia. Si alguien me hubiera asegurado que iba a ser capaz de aguantar con tan pocos, quizá no me hubiera privado de disfrutar del tabaco y hubiese seguido fumando. Creo que esas cantidades no pueden hacer daño.

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  21. Yo era de los tuyos, dejé de fumar varias veces, estaba años sin fumar, y volvía, voluntariamente a fumar de nuevo porque me gustaba, lo dejé definitivamente cuando me hospitalizaron en el 2000 con un infarto, pero el último consejo, si me vale... ;)
    Salud y abrazo

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    1. El último consejo es importante. Hay gente que enseguida cree tenerlo todo controlado y es una pena tirar por la borda el esfuerzo realizado. Conozco gente que llevaba muchos años y por una tontería —antes una causa muy frecuente era el puro de una boda— tienen que volver a pasar por lo mismo.
      Salud y abrazo, Genín.

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  22. Hola, Macondo
    He recuperado el blog, pero no las entradas que hice. El tabaco es un enemigo más para la salud. Buenos consejos nos has dado.
    Un beso!

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    1. Me alegra que hayas vuelto a tu blog, aunque del mío has sido tan maja de no marcharte aún cuando no has publicado en el tuyo.
      Un beso.

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    2. Gracias por alegrarte. No quería dejar de pasarme por aquí, pues ya sabes lo que me gustan tus publicaciones 🙂

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  23. Me alegro de que pudieras dejarlo,el tabaco es un veneno.

    Besos.

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    1. Si lo conseguí yo es que cualquiera puede hacerlo.
      Besos.

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  24. Lo peor de fumar es la costumbre que la mente asocia a ellos como el que va ligado al café, o a los actos sociales, así que son en esos puntos donde uno puede pasarlo peor y por supuesto fracasar en el intento.
    Yo confieso que soy una fumadora reincidente, (voy y vengo) y he cometido muchos fallos como pensar: por uno no pasará nada, error; ese será el primero de muchos.
    Lo mejor es ser cien por cien consciente de que quieres y vas a dejarlo. Y sobre todo cambiar hábitos que asocias a ese momento y buscar ayuda o complementos que necesites.
    Muy buenos consejos, Macondo.
    Y también aunque a los fumadores se nos catalogara como seres no gratos me alegra que no se permita y no se exponga el tabaco como lo hacía antes, estoy segura que las nuevas generaciones no tendrán el mismo interés que tuvimos las anteriores ya que no será tan común y normal el hecho de fumar.
    Un abrazo.

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    1. Pensar que lo tienes superado es uno de los mayores y más frecuentes errores que puedes cometer.
      Yo sigo siendo defensor de los fumadores, a los que se persigue aunque no molesten. Esta estúpida sociedad funciona por modas.
      Está claro que las nuevas generaciones lo tienen mejor, porque se sabe más sobre la nocividad y el tabaco —como las palomas— ha pasado de estar bien visto a ser perseguido.
      Un abrazo.

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  25. Yo nunca he fumado, aunque me crié rodeada de fumadores. Me desagradaba el olor, el humo, e incluso me daba miedo la dependencia, que yo intuía sin que nadie me hubiera dicho nada de eso. Hoy día, todos aquellos fumadores de mi infancia y adolescencia (familiares y amigos) son exfumadores, por suerte.

    En fin, tu decálogo me parece muy sabio y muy sensato, y hasta me parece que algunos de tus consejos podrían servir para alejarse de otros "vicios" (de actitud, de comportamiento). El tabaco podría verse como metáfora de todo aquello que hacemos voluntariamente y que nos perjudica.

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    1. Da gusto contigo, Ángeles. Creo que cuando naciste debió decirle a tu madre el médico: "Ha tenido usted una persona sensata".

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    2. Qué amable y qué gracioso eres, Macondo. Gracias :)

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